De tal forma que los alumnos podrán seleccionar entre alfabetizar o reforestar, pero esta última opción no estará al libre albedrío, pues obedecerá a un programa que aún está en elaboración.

Así lo dejó ver el ministro de educación, Arnoldo Bueso, que dada su instrucción como profesional de la dasonomía, ha sido un ferviente impulsor de la reforestación.

“Recuerde de dónde vengo” __expuso__ “Yo he sido uno de los que más ha impulsado esto, de hecho creamos un área demostrativa allá en Zambrano de más de dos mil hectáreas, donde hemos dividido por lotes de 10 hectáreas para cada instituto que desee realizar procesos de restauración de bosque”, expresó Bueso.

En cuanto al trabajo social con reforestación, El ministro fue claro. “Lo que ya no queremos es que la reforestación se haga de forma aislada, sin control y seguimiento”, especificó. Hizo referencia a áreas de bosques que ya están identificadas y califican para su restauración.

“Y esto pasa no solo por ir a sembrar el arbolito, sino que lo que reforestamos tenemos que protegerlo por cinco años consecutivos”, temporada esa que se convierte en responsabilidad directa del instituto que reciba la asignación de determinada área.

Como profesional forestal considera que es la única forma como se pueden recuperar los bosques. “Nosotros estamos afinando todos los detalles porque esta es una opción también que los educandos y los institutos tienen”, dijo, en referencia a la realización del servicio social.