Muchos se preguntan porque no hubo sesión del Legislativo el 24 de enero del 2023, si era el cierre de la primera legislatura y había un pacto entre los tres partidos mayoritarios para realizar tres reformas constitucionales.

Toda reforma constitucional debe ser aprobada en una legislatura y ratificada en la siguiente por tres cuartas partas de los 128 diputados, 86 para ser exactos.
La fecha 24 era la idónea, pues se aprobaba ese día y se ratificaba al día siguiente, cuando se inauguró la segunda legislatura, pero ni siquiera se convocó a sesión y mucho menos se clausuró la primera legislatura.

Eran tres reformas constitucionales las que se discutirían en el hemiciclo, una para potenciar la CICIH y otras dos de carácter político a la hora de nombrar Magistrados a la Corte Suprema de Justicia y al Fiscal General y Adjunto.

La primera reforma constitucional era dar poderes la CICIH al igual que el Ministerio Público, es decir de investigar y presentar requerimientos fiscales, pues es una solicitud de quienes la patrocinaran en el extranjero, indicó una fuente a Noticias 24/7 HN.

La segunda reforma constitucional era regresar a 15 Magistrados propietarios y cinco suplentes a la CSJ, tal como fue en la década de los 80s y 90s y así que todas las fuerzas políticas quedarán integradas.

Y la tercera reforma constitucional consistía en la elección del Fiscal General y Adjunto, aumentado a tres fiscales adjuntos, y así los cuatro partidos con mayoría de diputados tendría uno cada uno.

La fuente indicó a Noticias 24/7 HN que extrañamente el tripartidismo se enredó en el minuto 90 y la negociación se vino abajo, llegando al extremo que los consensos no pudieron darse tampoco en la primera votación para elegir los nuevos Magistrados a la CSJ.

Queda en el aire qué pasó y qué intereses se movieron para que estas reformas, en especial la de la CICIH ahora tenga que esperar un año, para ser ratificada siempre y cuando se apruebe en esta segunda legislatura.