La medida cautelar que obligó a LaLiga a inscribir a Gavi después de su renovación, a pesar de que el Barcelona no cumplía todos los requisitos del Control Económico para hacerlo, ha quedado en suspenso. El Juzgado de lo Mercantil de Barcelona ha alzado esta medida cautelar por un defecto de forma muy simple: el Barcelona presentó su demanda fuera de plazo.

El juzgado ha notificado a LaLiga en la mañana de este lunes el alzamiento de las medidas cautelares que obligaban a inscribir a Gavi. El Barcelona presentó aquella demanda un día fuera de plazo. Normalmente estas demandas tienen un día «de gracia», por si llegan tarde. La del Barcelona llegó un día después de ese «de gracia». Ahora el equipo culé podrá recurrir esta medida, pero de momento la cautelar queda anulada.

¿Qué pasa ahora? Pues que en cuanto se confirme esta medida judicial, Gavi no está inscrito en el primer equipo, tal y como obligó el juez. De todas formas él podrá seguir jugando como hasta ahora, porque tenía una ficha del Juvenil A, y un visado de LaLiga para poder competir con los de Xavi.

Ahora el Barcelona podrá recurrir este defecto de forma (aunque parece tener mal arreglo) y, en cualquier caso, seguir alineando a Gavi con normalidad. El problema lo tendrá cuando tenga que justificar su salario (el de verdad, no el de jugador del Juvenil) en las cuentas de final de temporada.

¿Qué sucedió previamente? Tras el mercado invernal el Barcelona se vio en la situación de tener que inscribir a Gavi con su nuevo sueldo. Después de renovar. Y, claro, no tenía nada que ver. De cobrar como un jugador del Juvenil a rondar los 8 millones de euros de salario era una diferencia enorme. Y el club azulgrana no estaba precisamente sobrado de límite salarial.

¿Cuál era la diferencia? Pues una norma nueva, aparecida en noviembre de 2022, que obligaba a todos los clubes que habían utilizado «palancas», a presentar un plan: para inscribir a jugadores no sólo tenías que poder justificar el salario de ese año (que el Barça podía), sino el de los dos siguientes (que no estaban ni cerca de poder hacerlo).

El Barcelona presentó en sede judicial argumentos contra este artículo, el 93.6 del reglamento de control económico de LaLiga, y también contra los tiempos de aplicación de esta norma. Y lo ganó: una medida cautelar obligó a LaLiga a inscribir al jugador sin contar con esa norma de los dos años. Pero lo hicieron tarde y, ahora, el mismo juzgado, ha alzado esta medida cautelar.

Consultado por Relevo, el Barça mantiene que la cautelar no se presentó tarde, que la decisión del juez no es firme y que ante ella cabrá recurso.