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Aterrador: Fiscalía narra cómo hombre asesinó de 32 puñaladas a su mamá en Colombia


La fiscal encargada del caso aseguró que Pablo Julián Lozano Pinto asesinó a su progenitora en un acto misógino. La culpaba de su orientación sexual y de su adicción a las drogas. Se confirmaron que fueron 32 las heridas que le ocasionó con un cuchillo.

En las audiencias que se adelantan ante un jueza de garantías de Bucaramanga, una fiscal de la seccional de Santander le imputó el delito de feminicidio agravado a Pablo Julián Lozano Pinto de 28 años de edad por la muerte de su progenitora Lucía Juliana Pinto de 47 años de edad, en hechos que ocurrieron en la mañana de ayer jueves 21 de septiembre en el tercer piso de un apartamento ubicado en la calle 51 con carrera 20 del barrio La Concordia, de Bucaramanga, Santander.

En el relato entregado por la fiscal se conoció que ya había antecedentes de agresión de Pablo Julián contra su progenitora.

“Cuando lo iba a visitar a Medellín y en la misma casa de Bucaramanga le pegaba puños, patadas y la amenazaba de muerte. Era misoginia con su mamá, pese a que ella intentaba a ayudarlo a salir de la drogadicción”, relató.

La misoginia es la aversión a las mujeres o falta de confianza en ellas, que según la Fiscalía era lo que ocurría en la relación entre los dos.

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Además, se señaló que Pablo Julián Lozano Pinto culpaba a su mamá de su orientación sexual y por su adicción a las drogas, motivos por los que ayer la habría asesinado.

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“Hubo una discusión y una vez más la agredió con patadas y palabras soeces, esta vez no hubo amenazas sino la mató. Tomó un cuchillo y fueron 32 puñaladas las que le causó, le quería causar dolor. Fue con sevicia y crueldad excesiva”, expresó la fiscal.

Otros detalles que se conocieron durante la audiencia de imputación fueron que Pablo Julián Lozano Pinto no tenía ninguna enfermedad mental acreditada y era consciente de lo que estaba haciendo. En el buzo que llevaba puesto quedaron rastros de sangre y fue él quien le abrió la puerta a los policías y les confesó que había matado a la mamá y que estaba en la habitación.

Ante la pregunta de la juez de garantías si aceptaba los cargos, el hoy imputado contestó, “Guardo mi derecho a guardar silencio”..., por lo que la juez lo tomó que no aceptaba los cargos.

Por el delito de feminicidio agravado, podría recibir una condena entre 500 y 600 meses de prisión.Vanguardia

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