Escondido entre montañas y neblina, el municipio de Cabañas se encuentra a 41 kilómetros de Márcala en el departamento de La Paz.

En el recuento de población de 1791 figuraba como Similatón, pueblo del Curato de Cururú. Se fundó debido a una petición realizada por los postulantes a la gobernación política de La Paz, obteniendo su resolución mediante carta con fecha 9 de marzo de 1897.

Y recientemente estuvo celebrando su 126 aniversario y decidió hacerlo en el marco del día internacional de la mujer, promoviendo la  iniciativa municipal “día de mercado”.

El cual consiste en darle un espacio,  todos los miércoles,  a las mujeres campesinas lencas para que vendan sus cosechas o sus productos como pan artesanal, comida, artesanías o manualidades en el centro del municipio, y han recibido el apoyo del alcalde Filiberto Melgar.

El proyecto comenzó con 5 mujeres, impulsadas por Martha Hernandez, una mujer lenca que confía en las capacidades femeninas, y ahora con esta iniciativa ya suman más de 20 emprendedoras, que han encontrado un mercado local para vender sus productos.

Tal es el caso de Herlinda quien viene desde la aldea El Palmar a vender variedad de pan artesanal  y comenta con orgullo que gracias a capacitaciones, capital semilla y el acceso a un mercado local, le proporciona ingresos para cubrir las necesidades de sus cuatro hijos, cuyo padre, como muchos casos en Honduras se desentendió de los menores.

“Yo siempre le digo a las mujeres de mi aldea, que nosotras somos capaces, que podemos trabajar y hacer nuestros propios ingresos” expresa.

Herlinda sueña con que sus hijos puedan estudiar y convertirse en profesionales. Es una mujer que nos da una gran lección de emprendimiento y fortaleza, deja constancia de la importancia de enseñar a las personas a pescar sus propios peces, porque sin duda los multiplicarán.

El caso de Herlinda refleja cómo el trabajo en equipo entre cooperantes internacionales como Cooperación Española y Oxfam, por mencionar algunos,  junto a las autoridades municipales, pueden cambiar vidas, solo haciendo un uso correcto de fondos económicos.

Estos fondos internacionales son invertidos en capacitación para que las mujeres puedan construir un plan de negocio, se puedan organizar y acceder a créditos para adquirir tierras de manera colectiva, emprender y poder vender su producto.

Y deja en evidencia el abandono y la falta de apoyo de los Gobiernos para con estas poblaciones que no necesitan que les regalen la comida, sino las herramientas para trabajar la tierra y ser auto sostenibles, sin embargo, todavía hay ausencia de una política nacional clara para apoyar a los pueblos indígenas de Honduras.

Una de las ocho etnias de Honduras es la lenca, que constituye el 4.6% de la población hondureña (INE 2016) y es una de las más numerosas.  La mujer es considerada uno de los principales entes de influencia en la alimentación del hogar,  son las encargadas de la producción de alimentos en un 45% y son quienes preparan los alimentos en el 87.1% de los hogares, según fuentes consultadas por la Universidad de El Zamorano.