Quien así lo considera, es el defensor de los derechos humanos, Carlos del Cid, al tiempo de lamentar que los recientes gobiernos nacionalistas, han sido insensibles y han hecho oídos sordos, a las observaciones que las organizaciones de derechos humanos han planteado, para cambiar las políticas represivas.

“Y también han olvidado las estrategias preventivas de invertir más dinero en atención a los sectores vulnerables”.

Por lo tanto, considera que debe invertirse en las familias, para que tengan oportunidades laborales y no incurran en la opción de la criminalidad.

“Hemos denunciado que, mientras funcionarios del gobierno estén vinculados al crimen organizado, narcotráfico y corrupción, eso seguirá siendo un mal ejemplo para la ciudadanía, en participar en la violencia si nuestros gobernantes están denunciados y no se hace nada al respecto”, aseveró.

En tal sentido, consideró que los funcionarios públicos metidos en acciones ilícitas, deberían ser suspendidos sus salarios y retenidos mientras estén en la cárcel, ya que todo eso genera un contexto de violencia en los hondureños.