La Organización Internacional para la Migraciones (OIM) informó que unos 171, 882 salvadoreños, hondureños y guatemaltecos fueron deportados entre enero y octubre de 2022, lo que representa un incremento del 72.1 por ciento.

Del total de deportaciones, 78.433 fueron desde Estados Unidos, 92.718 de México y 731 de otros países, con lo que la variación al alza fue de 71.987 casos.

De los tres países, que históricamente han conformado una de las zonas más violentas del mundo, El Salvador es el que registra el incremento de deportaciones más pronunciado.

Cada año, más de 500.000 personas procedentes de estos de los países del Triangulo Norte emigrar de manera irregular hacia los Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida.