Tegucigalpa. El diputado liberal Mauricio Villeda expresó este martes su preocupación por la falta de avance en la discusión sobre el proyecto de ley de empleo parcial, cuestionando la resistencia y la displicencia que percibe en algunos sectores.

«¿Por qué el temor y por qué la displicencia para llevar algo que va a beneficiar al bien común de Honduras? Creo que hay una ceguera política porque el trabajo parcial es muy diferente al empleo por hora que fue derogado», afirmó Villeda.

El legislador explicó que la propuesta de empleo parcial permitirá a patronos y trabajadores celebrar contratos donde se pacte una jornada laboral inferior a la máxima legal, garantizando una remuneración acorde a las horas trabajadas diariamente. Además, aseguró que esta modalidad respeta todos los derechos laborales, incluyendo seguro social y vacaciones, tal como lo avala la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Villeda también destacó la importancia de la iniciativa para la economía hondureña, citando ejemplos de países vecinos que ya aplican este modelo laboral con éxito.

Ante la falta de avance en la discusión del proyecto, el diputado advirtió que varios miembros de su bancada están considerando declararse en rebeldía legislativa.

«Si no aprueban la reforma al Código del Trabajo, no vamos a aprobar ningún otro proyecto, es una posición cívica», afirmó.

Otros líderes políticos y empresariales también respaldan la propuesta. El diputado liberal Marlon Lara subrayó la urgencia de aprobar la ley de empleo parcial para beneficiar a miles de hondureños y evitar la emigración de mano de obra. Por su parte, el expresidente del Cohep, Juan Carlos Sikaffy, consideró que esta modalidad laboral es una opción para la juventud hondureña que desea estudiar y trabajar simultáneamente, además de contribuir a reducir la fuga de talento.

Según datos del Cohep, el empleo por hora benefició a 700 mil personas desde su establecimiento en 2014 hasta su derogación en 2022, con 40,000 personas aún trabajando bajo esta modalidad en ese momento.

Ante la situación laboral en Honduras, el sector privado no descarta realizar acciones de protesta, como colocar una bandera negra frente a su sede en señal de duelo por la falta de empleos en el país.