En el primer semestre de 2023, se han presentado alarmantes cifras de abuso sexual infantil en el Distrito Central de Honduras, que comprende Tegucigalpa y Comayagüela. Según la portavoz del Ministerio Público, Lorena Cálix, se han registrado aproximadamente 38 casos en esta zona.

Cálix subraya que estas denuncias no son un hecho aislado, ya que las oficinas del Ministerio Público en todo el país continúan recibiendo constantes reportes de abuso sexual infantil. La situación es aún más grave en los departamentos de Atlántida y Francisco Morazán, que lideran las estadísticas en abuso sexual de menores de 13 años.

En un dato alarmante, Cálix menciona que en algunas semanas se presentan hasta tres casos de abuso sexual en la capital. A nivel nacional, el Ministerio Público maneja entre 800 y 900 denuncias de abuso sexual infantil cada año.

Los fiscales de protección de la niñez informan que, como resultado de estos delitos, se procesan de 3 a 4 autores con prisión preventiva en los tribunales del país cada semana.

Por otro lado, en San Pedro Sula, Cortés, al norte de Honduras, esta semana se lograron tres sentencias condenatorias mediante procedimiento abreviado, incluyendo el caso de un violador serial.

Sin embargo, a pesar de esas acciones legales, el Índice de Impunidad y Respuesta Institucional ante el Abuso Sexual Infantil en Honduras, elaborado por la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), revela que solo uno de cada diez casos judicializados resulta en una sentencia condenatoria.

Entre 2016 y 2022, según la ASJ, se presentaron 8,080 denuncias por abuso sexual infantil, concentrándose la mayoría en los departamentos de Francisco Morazán, Cortés, Comayagua, Atlántida y El Paraíso. En un período más reciente, de 2021 a 2022, se reportaron 3,112 denuncias, afectando principalmente a menores de 8 a 15 años. El índice de impunidad ha aumentado del 80.90 % en 2019 al 90.60 % en 2022.

Los delitos sexuales más comunes incluyen violación, violación especial, estupro y otras agresiones sexuales, según la organización. Es importante destacar que la mayoría de las víctimas son niñas, representando el 87.7 % entre 2016 y 2020, y aumentando al 89 % entre 2021 y 2022.

El Ministerio Público advierte que más del 90 % de los casos de abuso sexual infantil involucra a agresores dentro del entorno familiar, quienes se aprovechan de la confianza que los niños depositan en estas personas cercanas. "La mayoría de los agresores son personas que, valiéndose de vínculos de confianza, cometen delitos sexuales contra niños", enfatiza la portavoz Lorena Cálix.

Los padres y cuidadores deben estar alerta ante los signos de alerta, como cambios abruptos en el comportamiento, estados de depresión, insomnio, miedo a estar solos y pérdida de habilidades sociales, además de los signos físicos.