El fiscal general interino, Johel Zelaya, brindó sus primeras declaraciones a los medios de comunicación luego de su cuestionada juramentación, expresando en esta primera comparecencia que trae un compromiso de justicia imparcial y sin influencias externas.

El flamante Fiscal General Interino, Johel Zelaya, se dirigió a la prensa y al pueblo hondureño en su primer encuentro mediático tras asumir el cargo. En un discurso enérgico y comprometido, Zelaya enfatizó su compromiso con la persecución del delito sin excepciones, afirmando que su investidura le otorga el poder necesario para hacerlo.

«Tengo la investidura necesaria para perseguir el delito, y no vengo a cuidarle la espalda a nadie», declaró Zelaya ante una multitud de periodistas y ciudadanos interesados en conocer su visión y enfoque como líder del Ministerio Público.

El nuevo Fiscal General Interino también se refirió a la importancia de la imparcialidad en su gestión. «La máxima autoridad que tienen enfrente y que dirige los destinos del MP, tengan confianza que no viene a ejercer justicia selectiva», afirmó, buscando disipar preocupaciones sobre posibles influencias externas en su labor.

Además, Zelaya instó a la comunidad a mantener la fe en un sistema judicial justo y sin interferencias. «Oren porque el fiscal general interino jamás se deje llevar por llamadas oscuras y que la tentación jamás le doble el brazo», exhortó, reiterando su compromiso con el pueblo hondureño.

En un tono firme, el fiscal Zelaya se comprometió a luchar en nombre de la justicia y la equidad. «Este fiscal general luchará por ustedes, pueblo justo», enfatizó, alentando a aquellos que comparten su visión a unirse a su causa.

Zelaya dejó claro que no tolerará intentos de obstruir la justicia. «Quiero que me acompañen los justos, no voy a permitir llamadas para detener procesos», advirtió, enfatizando la importancia de mantener la integridad en las investigaciones y enjuiciamientos.

El nuevo líder del Ministerio Público subrayó la relevancia de que las personas se defiendan en los tribunales y no en los medios de comunicación. «La oportunidad no va a ser un medio de comunicación para defenderse, la oportunidad va a ser la Corte Suprema de Justicia; allí es donde tienen que defender su inocencia», sentenció.

Finalmente, Johel Zelaya se mostró inquebrantable frente a las posibles amenazas y presiones que pudiera enfrentar en su labor. «No tengo miedo en lo absoluto, el único que puede llevarnos es Dios, me pueden enviar mil mensajes diarios de amenazas y no me podrán detener», afirmó, destacando su determinación en la búsqueda de una justicia sin filtros ni miedos.