Caracas. El Gobierno de Venezuela ha rechazado de manera enérgica la reciente decisión de Estados Unidos de imponer restricciones de visa a «funcionarios y políticos» de Honduras, acusándolos de participar en actos que socavan la estabilidad democrática del país centroamericano. Considerando esta medida como una violación al derecho internacional, Caracas denuncia la acción como una forma de agresión política destinada a minar la integridad y la estabilidad de Honduras.

El Ejecutivo venezolano, a través de un comunicado, expresó su solidaridad con el pueblo y el Gobierno hondureño, instando a Estados Unidos a cesar sus políticas intervencionistas que amenazan la paz y la seguridad en América Latina y el Caribe.

«La República Bolivariana de Venezuela reitera su solidaridad con el pueblo y el Gobierno de Honduras, y exhorta al Gobierno de los Estados Unidos a cesar su política injerencista e intervencionista que amenaza la paz y la seguridad de los pueblos latinoamericanos y caribeños», agregó la Administración de Nicolás Maduro.

La medida estadounidense, anunciada el martes, justificó las restricciones de visa debido a la supuesta injerencia en la democracia hondureña y la designación irregular de un fiscal general y un fiscal general adjunto de manera interina. Los fiscales interinos, Johel Zelaya y Mario Morazán, fueron elegidos el 1 de noviembre por una Comisión Permanente del Parlamento, generando controversia y actos violentos en las afueras del legislativo.

Estados Unidos condenó el «reciente uso de la violencia en Honduras» y la falta de consenso en la elección de los fiscales, mientras que Venezuela interpreta esta acción como un intento de presión política y agresión contra la soberanía hondureña.