Tegucigalpa. El exjefe de las Fuerzas Armadas de Honduras, Romeo Vásquez Velásquez reprochó que las autoridades policiales no han llamado a la familia para ofrecer avances de la muerte del sobrino de su esposa al igual que la de los otros tres amigos, incluyendo al hijo del expresidente Porfirio Lobo Sosa, el 14 de julio en Tegucigalpa.

En ese sentido, Vásquez Velásquez manifestó que no saben cómo va el caso, pues ninguna autoridad ha llamado a sus parientes para decir cómo avanza el caso, y que espera que este no quede en la impunidad.

“Hay muchos casos que están en la impunidad, aquí asesinan personas y como que si nada, ojalá y se involucre la embajada americana porque necesitamos justicia, las personas que cometieron este delito tienen que pagar una condena, tanto los hechores materiales como intelectuales”, argumentó.

Reiteró que quieren ver soluciones en este caso y en todos los demás, donde también "nos solidarizamos con todas las familias que han perdido un pariente de forma violenta".

Señaló que los jóvenes, Said Lobo, hijo del expresidente Porfirio Lobo, así como el sobrino de la esposa del exjefe de las Fuerzas Armadas, identificado como Luis Zelaya, Salomón Velásquez y Norlan Rivera, éste último el motorista de Said, fueron asesinados de una forma grotesca, por lo que las autoridades deben resolver esta situación.

“No podemos especular, creemos en la ley y estamos pensando que habrá respuesta para todas las familias, porque paso, la operación fue ejecutada de forma perfecta, andaba uniformados simulando ser policías, gente entrenada, mientras no sepamos quién fue, no vamos estar tranquilos”, argumentó.

Señaló que los videos muestran que las personas usaron armas de grueso calibre, automáticas y con un buen entrenamiento.

“Pedimos justicia, eso es lo primordial en este caso”, apuntó.