Tegucigalpa. El secretario de la Presidencia de Honduras, Rodolfo Pastor de María , ha emitido una respuesta al llamado de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en relación con la elección interina del Fiscal General y el Fiscal General Adjunto en el país.

El pasado jueves, la CIDH había instado al Congreso a establecer un «diálogo constructivo» y expresado su preocupación por la violencia que se había desencadenado en el recinto durante la elección interina de los fiscales del Ministerio Público.

En este contexto, la elección de Johel Zelaya y Mario Morazán como fiscal general y fiscal general adjunto en funciones interinas ha generado tensiones políticas en Honduras.

El funcionario manifestó desde su su cuenta de X (antes Twitter): «Compartimos el llamado de la CIDH, condenamos la violencia perpetrada y mantenemos la disposición al diálogo respetuoso y constructivo».

Desde el oficialismo, se han expresado críticas hacia «sectores oscuros» que supuestamente manipulan la situación para mantener privilegios e impunidad y obstaculizar la reconstrucción del Estado de derecho en el país.

«Durante demasiado tiempo los poderes fácticos, internos y externos, han distorsionado la esencia del Estado, impedido la apertura democrática necesaria y destruido la oportunidad de consolidar un sistema más justo para nuestro Pueblo», añadió el secretario de la Presidencia.

El Gobierno también ha señalado al exfiscal general Óscar Chinchilla por no investigar adecuadamente las presuntas implicaciones del expresidente Juan Orlando Hernández en narcotráfico y crimen organizado.

Cabe mencionar que el conflicto en el Congreso hondureño surgió debido a la falta de consenso entre los partidos oficialistas y la oposición en la elección del fiscal general y el fiscal general adjunto para el período constitucional 2023-2028. La elección interina fue realizada por la Comisión Permanente del Congreso Nacional, dominada por los diputados oficialistas, lo que generó oposición por parte de otros sectores políticos.