Esto por la compra de 129 ventiladores mecánicos infuncionales, que se suponía servirían para atender a los pacientes afectados por el Covid.

Dado que le ministro de Relaciones Exteriores también funge como comisionado especial para la atención de la pandemia, la ATIC investiga si la compra fue indolente, o simple incapacidad para administrar una emergencia.

Rosales brindó la declaración en las oficinas de la Cancillería de la República, donde en el marco de la investigación respondió preguntas respecto a la adquisición de ventiladores mecánicos por parte de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) durante la emergencia sanitaria nacional.

En esta adquisición, el Estado gastó 47.5 millones de lempiras, pero los aparatos aparte de no ser específicos para tratar pacientes por covid-19, venían incompletos dado que les faltaban circuitos, válvulas y accesorios por lo que se necesitó una inversión millonaria adicional para ponerlos a funcionar.