Agregaron además que quienes la autorizaron se dicen llamar “cristianos” pero que en realidad lo que necesitan es “que les saquen esos demonios”.

Este fin de semana los pobladores de Roatán, Islas de la Bahía realizaron una serie de protestas y manifestaciones en contra de la instalación de las denominadas Zedes (Zonas de Desarrollo Económico) en sus comunidades, como Crawfish Roak, ante la amenaza de ser desplazados de sus comunidades ancestrales.

“Nosotros somos directamente afectados con esa ley y por eso estamos en la lucha, y no solo nosotros como comunidad, sino que la isla (Roatán) y toda Honduras va a ser afectada por esa ley de las Zedes”, dijo una dirigente comunal.

Pero otros pobladores fueron más enfáticos y menos contemplativos para con los funcionarios radicados en Tegucigalpa y no dudaron en manifestar que esos burócratas son objeto de posesión diabólica.

“Uno no puede decir que están locos para haber aprobado una ley como esa, sino que solo una persona que esté realmente endemoniada puede hacer algo que pasa más allá de la locura; entonces por eso creemos que es una ley diabólica”.

Pero todavía hay más. “Y la gente que hace esto hacen creer que son cristianos, que aman a Dios, pero quiero decirles que ustedes tienen que ser liberados por nuestro Señor Jesucristo”.

Es comprensible el malestar de los pobladores, porque desde el día que llega un extranjero a su propia comunidad y se da el ‘lujo’ de decirles que tienen que abandonarlas porque sus tierras va a ser expropiadas, pues resulta lógico que piensen que el ‘cachudo’ está en ellos.

Por su parte, Miriam Miranda, coordinadora de la Organización Fraternal Negra de Honduras, OFRANEH, expresó que los inversionistas de la ciudad modelo que se construye en Roatán, en contra de la voluntad de la comunidad, harán todo para desacreditar y comprar a la gente.

“Hay un trabajo arduo, no solamente por parte de ustedes, sino que, en tierra firme hay muchas personas que hacen un trabajo de acompañamiento, denuncia y sobretodo, de clarificación de lo que significa la entrega de la soberanía mediante a las Zede”, indicó.

Agregó que las fuerzas de poder en Honduras confabuladas con extranjeras están presionando para desvirtuar y negar la lucha que se ha emprendido para evitar que el país sea vendido de esta forma infame.