El argentino Leo Messi no acudió hoy a la primera sesión de trabajo programada por el entrenador Ronald Koeman en el Barcelona.

El argentino se mantiene firme en su postura y no se ha presentado al entrenamiento porque ya no se considera miembro de la plantilla azulgrana y, por lo tanto, no tiene la obligación de asistir a la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí.

Pero el Barcelona sí cree que es, todavía, su capitán. Según el convenio colectivo de la Liga-AFE, incurrirá en una falta grave por sus ausencias.

El documento, en su artículo 5 del Anexo V, relativo al régimen disciplinario, establece que se considera falta grave "la primera y segunda falta consistente en el abandono del trabajo, sin causa justificada, no tratándose de un partido".

De mantenerse en su negativa a acudir a la Ciudad Deportiva y no presentarse mañana, y al cometer falta muy grave, podría ser suspendido de empleo y sueldo, según lo estipulado en el convenio.