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Hay 88 municipios en Honduras que están en el “ojo del huracán” por lluvias, según ministro de Copeco


El ministro de la Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgo y Contingencias Nacionales (Copeco), Ramón Soto, señaló en el programa “En La Mira” del periodista Carlos Martínez, que de los 298 municipios de Honduras, 88 están en el “ojo del huracán” en este momento debido a las lluvias.

“Nosotros tenemos 88 municipios en Honduras que están en el ojo… en el mapa”, con mayor vulnerabilidad por las lluvias que están cayendo en el territorio nacional, según el funcionario.

Mencionó que entre los más vulnerables están los del Valle de Sula, Santa Bárbara, Olancho, Atlántida, la zona Sur, Colón, Yoro, y del departamento de Atlántida, que son altamente vulnerables.

“Eso depende en donde se concentre la mayor cantidad de precipitaciones y la ruta que lleven; realmente vulnerable es todo el país”, advirtió.

Soto dijo que Honduras está muy vulnerable, no solo por las tormentas Eta e Iota sino por una serie de factores que se han acumulado, que tiene que ver el cambio climático, la cultura de “nosotros” como seres humanos y como habitantes de este planeta, la cultura de la destrucción y la de que a los ciudadanos les vale dañar el medio ambiente con tal de lograr un beneficio personal.

“Eso también nos tiene vulnerables, no nos importa con tal de solucionar el problema nuestro nos vale la colectividad, no nos importa ir a construir en un bordo y estarlo ejecutando cada día, a nadie le importa de un arenero estar sacando arena y estar debilitando un bordo, porque la cultura del individualismo, de no pensar en la colectividad nos ha hecho un daño terrible”, lamentó.

Manifestó que el país está muy vulnerable “y que por las mismas situaciones del cambio climático a expensas de que cuando nos venga un fenómeno como nos está llegando en este momento, nos cause mayores problemas”.

Cada día Honduras está más vulnerable

“¿Y sabe que es lo más terrible?, que estamos (Honduras) cada vez más vulnerable, porque cada vez los fenómenos nos atacan con mayor fuerza, con mayor potencia”, expuso Ramos.

Recordó que desde principios de este año, la proyección que presentaron para el caso a la Secretaría de la Agricultura y Ganadería “les dijimos como iba a estar el régimen de precipitaciones en las diferentes zonas agrícolas del país, y que acertamos en un 98 por ciento y que por eso no vamos a tener mayores problemas con las cosechas, porque la mayoría de los agricultores siguieron las instrucciones que la Secretaría de la Agricultura y Ganadería dio, apegados a la proyección del clima que nosotros les hicimos”.

En este momento, la proyección que tienen es que va haber más lluvia que en los años anteriores, “y esto combinado con la alta vulnerabilidad que tenemos se convierte en una bomba de tiempo, especialmente para las zonas más vulnerables”, como las que 88 mencionó.

“Vamos a tener un 15 por ciento de mayor cantidad de agua, en lo que va de este año hemos estado en un 15, 18, 20 por ciento, solo que hemos tenido una gran ventaja y mucha suerte; estas lluvias han sido bien distribuidas, no han caído una sola semana sino que se han ido distribuyendo, lo cual ha sido beneficioso para la agricultura y ganadería, beneficioso para la captación de agua por parte de las represas”, resaltó.

Mencionó que “a pesar de que hemos tenido unos incidentes de los cuales hemos respondido de inmediato como Copeco, como Sinager (Comité de Salud del Sistema Nacional de Gestión de Riesgos), como alcaldías municipales, yo no veo ninguna desventaja, porque las lluvias han sido bien distribuidas hasta este momento y ojalá que Dios nos siga bendiciendo, y que sigan distribuyéndose así”.

“Ahorita nosotros hemos proyectado una cantidad entre lunes, martes y miércoles 100 milímetros, pero se han distribuido bien. Aunque también se han creado dificúltales y problemas especialmente en occidente, no hemos tenido grandes situaciones que lamentar”, enfatizó.

Indicó que “cuando la lluvia es consecutiva, tiende a saturarse, la capacidad de absorción de las diferentes estructuras del cielo, no permiten que saturen esa capacidad del campo, ya pasa a un punto de sobresaturación; entonces ya no puede absorber más agua y es donde ocurren deslizamientos, donde ocurren los famosos deslaves y los ríos también no tienen la capacidad hidráulica de evacuar toda esa cantidad de agua”, problema que reiteró que en este momento no se da, porque se ha tenido en gran medida, porque ha sido bien distribuida el agua.

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