China hizo historia hoy al alunizar con éxito una sonda en la cara oculta de la Luna.

La Administración Nacional del Espacio de China (ANEC) indicó que el alunizaje se produjo después que el Centro de Control Aeroespacial de Pekín diera la orden, con lo que la sonda inició el descenso desde el punto más cercano de su órbita, a 15 kilómetros de la Luna.

"Fue un gran desafío en muy poco espacio de tiempo, con gran dificultad y riesgos", describió el jefe de los diseñadores del programa de exploración lunar chino, Wu Weiren, en declaraciones publicadas por la agencia estatal de noticias Xinhua.

La Chang'e 4 realizó la fase final del descenso de forma completamente autónoma, aunque hasta entonces había operado bajo las directrices de Pekín a través de las órdenes recibidas vía el satélite de enlace Queqiao, que está funcionando como "espejo" entre el centro de control chino y la sonda.

La ANEC precisó que el alunizaje se produjo a 177,6 grados de longitud este y 45,5 grados de latitud sur, en una llanura rodeada de montañas que se elevan hasta 10 kilómetros. A la llegada, la sonda desplegó los paneles solares y las antenas, tomó las primeras fotografías detalladas que existen de la cara oculta de la Luna y las envió a la Tierra, rebotándolas a través de Queqiao.