El asistente Presidencial en Atención a Presos Políticos y Sectores Sociales de la Presidencia de la República, Pedro Joaquín Amador manifestó hoy que los centros penales son una bomba de tiempo controladas por el crimen organizado en Honduras.

“El tema carcelario es una bomba de tiempo, hay mano del crimen organizado coludida con algunos policías y militares, hay que decírselos, aunque no les gusta” declaró Amador.

El funcionario dijo que espera que las nuevas autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP), el director Otoniel Castillo Lemus, interponga sus buenos oficios para tratar de resolver la situación, que describió que es crítica históricamente.

Según Amador, la estructura de las anteriores administraciones lideradas por el Partido Nacional, sigue siendo parte del sistema de gobierno, siguen operando y por ende es oportuno hacer una depuración para sacar los cómplices del crimen organizado.

Finalmente reconoció que no es un tema sencillo enfrentarse al crimen organizado y desmantelarlo, especialmente dentro de las cárceles porque hay autoridades policiales y militares coludidas “el control de las cárceles está en manos de estructuras criminales” finalizó.