Uruguay completó una seria actuación y derrotó a Estados Unidos por 2-0 para avanzar a semifinales del Mundial Sub-20, donde se las verá con Israel, revelación del torneo tras eliminar a Brasil. La Celeste es el único representante de Conmebol que sigue con vida y la esperanza del fútbol sudamericano para recuperar el trono del fútbol juvenil. Marcelo Bielsa cuenta con una generación dorada que ya quiere su primer premio gordo.

A pesar de la baja de Luciano Rodríguez, expulsado en el duelo de octavos de final, Uruguay se mostró como un equipo trabajado, con las ideas claras. Firmes en todo momento, desde una zaga impenetrable a un centro del campo bien armado y una ofensiva que encontró la recompensa en sus llegadas. Duarte abrió el marcador a los 21 minutos y un buen arranque de segunda mitad sirvió para aumentar la ventaja gracias a un tanto en su propio arco del defensor Wynder.

Conmebol genera dudas

Si bien los cinco representantes sudamericanos superaron con buena nota la fase de grupos, en las rondas finales cayeron cuatro de ellos de manera bastante dolorosa. En octavos cayó Argentina a manos de Nigeria y también Ecuador contra Corea del Sur, su bestia negra. Ya en cuartos de final llegó la sorprendente eliminación de la canarinha y la derrota de Colombia ante una Italia que se mostró intratable.

Uruguay luchó hasta el final por el Sudamericano Sub-20 y demuestra en esta cita mundialista que su éxito no fue fruto de la casualidad. Cuenta con jugadores de carácter, con amplia experiencia ya en el fútbol profesional y que quieren lograr la soñada renovación en la absoluta. Varios de ellos ya han sido convocados por Bielsa para los dos partidos amistosos de junio y nada más terminar este Mundial Sub-20 acudirán a la llamada del nuevo seleccionador a Montevideo.

Una semifinal para soñar

Uruguay llegará este jueves al duelo ante Israel con un día menos de descanso que su rival. No obstante, la selección europea necesitó de la prórroga para acabar con Brasil y el desgaste fue enorme. Los charrúas, por su parte, controlaron el partido ante Estados Unidos y lo cerraron con una fortaleza defensiva envidiable. Además, Luciano Rodríguez debe llegar con energías renovadas y aún se esperan los goles de Fabrizio Díaz, que en el Sudamericano sumó cinco y aquí aún no se ha estrenado.

Será la cuarta final que Uruguay dispute en un Mundial Sub-20. La primera llegó en 1979 y luego, más recientes, se vivieron en 1997 y 2013. En estas dos últimas la Celeste alcanzó la final pero cayó en ambos casos en el partido por el título. Veremos si en esta ocasión los jugadores de Broli logran culminar la misión.