Valle. Una serie de intensas inundaciones en la zona sur de Honduras ha dejado a unas 16 comunidades completamente incomunicadas. La Costa de los Amates, ubicada en Alianza, Valle, se encuentra nuevamente  afectada debido al desbordamiento del río Goascorán, causado por las fuertes lluvias registradas en este mes de septiembre.

Este trágico escenario se ha repetido en años anteriores, ya que el área de la Costa de Los Amates sufre repetidamente las crecidas del río Goascorán. Como resultado de estas inundaciones, aproximadamente cuatro mil residentes se ven afectados por la pérdida de sus hogares y pertenencias.

Las autoridades hacen un llamado urgente al gobierno para que brinde asistencia a los hondureños que están sufriendo las consecuencias de esta situación crítica. La comunidad de El Cubulero, también se encuentran en una situación precaria, con decenas de casas inundadas y cultivos arruinados debido a la crecida del agua, que alcanza la mitad de las viviendas.

A pesar de las promesas de la presidenta Xiomara Castro de llevar a cabo obras para mitigar la vulnerabilidad en la zona, los habitantes siguen padeciendo los mismos efectos devastadores de la temporada de lluvias. La Secretaría de Infraestructura construyó una borda y obras de mitigación, que, según los residentes, resultaron ser inadecuadas para controlar los efectos de la crecida del río Goascorán, calificándola como «una borda de papel» debido a su estructura endeble.

La situación en la zona sur de Honduras resalta la urgente necesidad de medidas más efectivas para abordar las inundaciones recurrentes y proteger a las comunidades vulnerables de futuras catástrofes relacionadas con las lluvias.