Dolares Hodnuras

Restricción de dólares afecta importaciones y economía nacional, advierte economista

Tegucigalpa. El economista Mario Sosa ha expresado su preocupación por la continua restricción de dólares en Honduras, señalando que esta situación está teniendo un impacto negativo en la importación de materias primas para diversos sectores económicos. Sosa advierte que, a nivel internacional, no es posible realizar compras con lempiras, lo que dificulta aún más el proceso de importación.

«El problema que se observa en el sistema financiero es que al ir a la banca, muchos bancos solo venden cierta cantidad de dólares o quizás nada», explicó el experto en temas de economía. Esta limitación en la adquisición de dólares está afectando especialmente a las micro, pequeñas y medianas empresas que dependen de la importación de suministros para su producción.

Sosa destacó que esta restricción también afecta al consumo, ya que las personas que viajan al extranjero necesitan dólares para poder salir del país. «Creo que estas condiciones que el Gobierno está poniendo es para regular el flujo de efectivo de la divisa que llega a Honduras», agregó.

El economista también cuestionó el manejo de las remesas en el sistema financiero, señalando que, al ser reclamadas por los familiares en los bancos, no se entregan en dólares, sino en lempiras. «Entonces esos dólares quedan en el sistema financiero y ahí dicen que no hay», expresó Sosa.

Otros analistas económicos coinciden en que el tema de las divisas, junto con la salida del CIADI y la socialización de la Ley de Justicia Tributaria, están teniendo un impacto negativo en los indicadores socioeconómicos del país. Esto se refleja en un aumento del desempleo, la pobreza y la migración, con más de 2.4 millones de hondureños enfrentando problemas de empleo, lo que equivale a más del 61 por ciento de la fuerza laboral activa.

Estas preocupaciones resaltan la urgencia de abordar las restricciones en la disponibilidad de dólares y tomar medidas para estimular la economía nacional y proteger el bienestar de los ciudadanos hondureños.

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