La difunta hermana del mandatario, Hilda Hernández, como un enlace entre ambos. La también directora de Comunicaciones y Estrategia del gobierno de Hernández fue la persona a quien se le hizo llegar la suma de dinero del soborno, según el extraditado Rivera Maradiaga.

Fue en la voz del “Cachiro” Devis Leonel Rivera Maradiaga, quien, como testigo de la Fiscalía en el juicio que se le sigue al expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, respondió cuando se le preguntó si conocía al acusado, respondió afirmativamente, identificándolo con los apodos de “John”, “J.O.” y “Juancho”, corroborando así la versión previamente presentada por José Sánchez, también conocido como “el contador” por la Fiscalía.

Sánchez, el primer testigo utilizado por el gobierno para declarar contra Hernández, afirmó que “Juancho” era el seudónimo utilizado por los allegados del expresidente.

Durante el interrogatorio, Sánchez compartió detalles de una conversación en la que Hernández expresó interés en contar con los servicios de un laboratorio de drogas de Geovanny Fuentes, un narcotraficante hondureño condenado en febrero de 2022 y que este lo llamó “Juancho”.

En respuesta a la pregunta de la Fiscalía sobre si al exmandatario lo llamaban “Juancho” y Sánchez explicó que no, y añadió que ese apodo solo era conocido por los allegados del expresidente.

Al ser interrogado por la Fiscalía de Nueva York, Rivera Maradiaga respondió que sí pagó alrededor de 250 mil dólares a Hernández a cambio de protección de sus actividades ilícitas.

En las primeras declaraciones del Cachiro surge el nombre de la hermana del expresidente, Hilda Hernández, quien murió durante un accidente del helicóptero en el que viajaba junto a su equipo de trabajo.

¿Con qué sobornaste a JOH? ¿Y cuándo? Le preguntó el fiscal, a lo que el Cachiro respondió que: “en 2012, con $250.000. Fue enviado a Tegucigalpa a su hermana Hilda”.

El menor de los hermanos Rivera Maradiaga, del cartel Los Cachiros que operaban el negocio de las drogas en Colón, explicó que los sobornos fueron a cambio de protección para él y su hermano.

Asimismo, amplió que también esperaban recibir “contratos gubernamentales para nuestros negocios”, esto a fin de lavar el dinero del narcotráfico.