La víctima, visiblemente afectada, transitaba por una calle de Guaimaca cuando uno de los delincuentes  descendió de la motocicleta y, sin mediar palabra, le arrebató el teléfono móvil y, aunque la mujer asaltada intentó oponer resistencia, al final el «rabiche» cargo con el aparato.

En cuestión de segundos, ambos se dieron a la fuga con la misma tranquilidad con la que llegaron. El hecho fue presenciado por varios ciudadanos que ni un dedo movieron.

A pesar de la gravedad de este y otros casos similares, desde la Secretaría  de Seguridad se asegura que la situación está bajo control.

Sin embargo, los habitantes de Guaimaca expresan su descontento y preocupación, señalando que los operativos de seguridad no han sido efectivos para frenar la ola delictiva que afecta a la comunidad.​