En medio de la preocupación y la angustia hondureña, Lidia Hernández, residente en Madrid, ha levantado su voz para buscar desesperadamente a sus familiares desaparecidos en Honduras. Según sus declaraciones, más de 15 personas, incluyendo a sus dos hermanas, y un hermano, fueron presuntamente detenidas por la policía en una aldea cercana a las Marías, cerca de la Barra del Ulúa.

Hernández denuncia la falta de respuesta y acción por parte de las autoridades locales, a quienes interpela directamente, cuestionando su paradero y la eficacia de las labores de búsqueda y rescate.

La situación se agrava con el testimonio de familiares y vecinos que también han reportado la desaparición de personas trabajadoras y respetuosas, en su mayoría mujeres. Las denuncias de Hernández apuntan a una falta de transparencia y acción inmediata por parte de las autoridades competentes, quienes han instado a los familiares a esperar un plazo de 24 horas antes de actuar. Este lapso de tiempo, según Hernández, es inaceptable en un país marcado por altos índices de violencia y casos de desaparición no resueltos.

Hasta el momento, las autoridades hondureñas no han emitido un comunicado oficial respondiendo a las acusaciones y demandas de Hernández y los familiares afectados. La incertidumbre y la espera continúan mientras la comunidad internacional sigue de cerca este caso en un contexto de creciente preocupación por los derechos humanos y la seguridad en Honduras.