Tegucigalpa. El dirigente del Partido Nacional, Roberto Ramón Castillo, expresó su descontento con la forma en que se llevó a cabo la elección del Fiscal General y Fiscal Adjunto. Castillo afirmó que los miembros de su partido «se entregaron solos» en este proceso.

«Se entregaron ellos solos, no se entregaron al presidente (Mel) Zelaya, se entregaron a la Fiscalía, a la Corte (Suprema de Justicia)», señaló Castillo, sugiriendo que hubo una falta de cautela por parte de los miembros del Partido Nacional al negociar estas designaciones.

El dirigente del Partido Nacional cuestionó la capacidad de negociación de quienes estuvieron a cargo de este proceso, insinuando que no tuvieron el suficiente tacto político o que estuvieron influenciados por intereses personales de un grupo dentro del partido. «Lo que yo he visto es que la situación de la gente que negoció deja mucho que desear», agregó.

Castillo también mencionó que según sus conversaciones con un diputado nacionalista, el exalcalde Nasry Asfura habría sido el encargado de las negociaciones. Sin embargo, criticó que la bancada del Partido Nacional no haya tomado una postura más firme para evitar que Asfura liderara estas negociaciones.

Por otro lado, el dirigente del Partido Nacional elogió la capacidad de negociación del Partido Libertad y Refundación (Libre), reconociendo su habilidad, experiencia y estrategia política. «No sé si el expresidente Mel Zelaya ha estado involucrado en esto, pero tienen una línea política que es el control total del sistema judicial», concluyó Castillo.