Tegucigalpa. La ‘barbie fiscal’  Francia Medina se encuentra en el ojo del huracán tras ser acusada de sustraer la asombrosa suma de 88 millones de lempiras de las arcas del Banco Central de Honduras (BCH), superando el famoso «Carretillazo» de 2009.

Según el Ministerio Público (MP), Medina realizó un total de 37 transacciones entre 2019 y 2023, convirtiéndose en una visitante recurrente del banco. Esta cantidad supera el récord del «Carretillazo», cuando Enrique Flores Lanza sustrajo 50 millones de lempiras para financiar el fallido proyecto de la Cuarta Urna en 2009.

Yuri Mora, portavoz del MP, informó que la fiscal retiró oficialmente 88 millones 600,000 lempiras en las mencionadas 37 transacciones. En promedio, esto equivale a alrededor de 2.4 millones de lempiras por transacción durante cuatro años, sin que el departamento de cumplimiento del BCH alertara a las autoridades pertinentes.

Kenneth Madrid, director legal de la Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ), destacó que existe un procedimiento en el BCH para verificar las firmas autorizadas en retiros de fondos en efectivo, cuestionando por qué no se activó en este caso.

Marvin Ponce, exasesor presidencial, sugirió que la fiscal Medina podría ser la cara visible de una estructura más amplia que involucra a funcionarios del BCH, el Ministerio Público, jueces e incluso el crimen organizado. «Sacar dinero del Banco Central a estos niveles ya es considerado un crimen organizado», expresó.

En respuesta, el BCH indicó que devuelve los depósitos de garantía mencionados cuando lo solicitan las fiscalías del Ministerio Público. Actualmente, la fiscal Medina enfrenta un cambio radical en su estilo de vida, recluida en la penitenciaría femenina de Támara y a la espera de su audiencia inicial programada para el domingo.