El Motagua de Honduras y el Cincinnati de Estados Unidos iniciarán este miércoles su andadura en la Copa de Campeones de la Concacaf con el partido de ida que se jugará en Tegucigalpa, entre dos clubes que por primera vez se enfrentarán en el torneo regional.

Motagua vuelve a la Concachampions luego de dos años de ausencia.

El actual campeón es el único representante de Honduras en el torneo continental en la presente edición del torneo, será su vigésima (20°) participación en la máxima competición de la Concacaf.

El equipo hondureño llega al juego contra el Cincinnati tras perder el sábado el clásico nacional con el Olimpia, correspondiente a la séptima jornada del torneo Clausura.

Dirigido por el argentino-hondureño Diego Vázquez, Motagua, vigente campeón hondureño, es tercero en el Clausura con 11 puntos.

Por temas de transmisión de televisión, el cotejo será a las 9:00 PM en el Estadio Nacional de Tegucigalpa, siendo el encuentro que cerrará el telón este miércoles.

«En este caso todo tiene doble lectura, es positivo que vengamos con ritmo pero venimos de un desgaste de jugar un clásico y hay dependencia también, todo depender de lo que hagamos en la cancha y como se ve el resultado. Somos positivos y esperamos imponer nuestras condiciones en la cancha», dijo en conferencia de prensa el entrenador del Motagua, Diego Vázquez.

Por su parte, el entrenador del Cincinnati sorprendió al hablar sobre lo que más le preocupa de Motagua previo al duelo de la Champions Cup.

“Principalmente vi los últimos tres juegos, contra Juticalpa, Lobos y Olimpia, ese es nuestro análisis, pero creo que hay muchas cosas que podemos hacer con éxito, teniendo o no la pelota. Algo que ayudó es poner a nuestros jugadores contra clubes similares, fue una buena semana de preparación. La verdad tengo mucho respeto por Motagua y creo que será un desafío para nosotros”, comentó Pat Noonan.

El Cincinnati llegó el lunes a Tegucigalpa para el juego contra Motagua, uno de los cuatro mejores equipos del fútbol hondureño, y este martes conoció la cancha del Estadio Nacional José de la Paz Herrera, en la capital hondureña.