Cortés .El Cuerpo de Bomberos de Honduras ha estado llevando a cabo operaciones de rescate y evacuación en respuesta a las recientes lluvias intensas que han afectado a varias comunidades en los departamentos de Cortés y Yoro, en el norte del país.

La institución benéfica informó a través de sus redes sociales que hasta la fecha se han evacuado más de 1,500 personas, incluyendo niños y adultos mayores, de áreas afectadas por las lluvias.

Las imágenes compartidas por el Cuerpo de Bomberos revelan escenas de familias siendo rescatadas en lanchas, trasladadas en ambulancias que lograron acceder a zonas afectadas, y ayudando a ciudadanos a subir sus pertenencias en camiones.

Una de las fotos que ha conmovido a muchos muestra a un miembro del Cuerpo de Bomberos cargando en brazos a un bebé de pocos meses de edad. La noble institución  expresó en sus redes sociales: «Nuestro compromiso con el pueblo hondureño se resume en el sentimiento del amor al prójimo.»

Según el último informe de la Secretaría de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco), las lluvias han dejado seis personas fallecidas, 46,658 afectadas, 2,364 evacuadas y 1,946 personas alojadas en refugios temporales.

Además, debido a las fuertes precipitaciones, 212 comunidades se encuentran incomunicadas, 26 viviendas han sido destruidas y 1,031 viviendas han resultado afectadas.

La región más afectada es el valle de Sula en el norte del país, una zona crucial para la economía hondureña. Las crecidas de los ríos Ulúa y Chamelecón han obligado a los equipos de rescate a evacuar a miles de personas y llevarlas a refugios temporales o casas de familiares.

En respuesta a esta situación, Copeco ha extendido la alerta roja por 24 horas en cuatro departamentos y algunos municipios y ha declarado alerta amarilla en el resto del país. Esto se debe a la persistencia de un sistema de baja presión que continuará generando lluvias en gran parte del territorio nacional.