Tegucigalpa. En medio de una creciente crisis en el Congreso Nacional, el presidente Luis Redondo señaló a las bancadas de oposición como responsables de «boicotear» los acuerdos alcanzados, obstaculizando el normal desarrollo de sesiones y la agenda legislativa necesaria para el país.

Redondo reveló que, durante la elección del Fiscal General, el Partido Nacional aceptó candidatos propuestos por la oposición para el Ministerio Público, a cambio de la condición de elegir al director de fiscales. Sin embargo, el partido retrocedió, rechazando sus propias posturas previamente acordadas. «Cada vez que nosotros le hemos dicho que sí, siempre la boicotean», lamentó Redondo.

La Comisión Especial de Diálogo Legislativo, creada a solicitud de las bancadas de oposición, también fue mencionada por Redondo como objeto de boicot por parte de estas. El presidente del Congreso no descartó la posibilidad de conversaciones entre diputados opositores y la junta directiva, señalando el descontento de algunos con los liderazgos que consideran inapropiados.

Redondo hizo referencia a un grupo de congresistas nacionalistas que buscaba garantías de impunidad, indicando que al no aceptar esas demandas, la bancada se ve arrastrada a posturas inadecuadas. «Espero que los diputados que tienen algo de moral reflexionen y recapaciten», advirtió.

Respecto a la bancada del Partido Salvador de Honduras (PSH), Redondo opinó que están «muy mal dirigidos y muy mal orientados», señalando la situación interna de dicho partido.

En defensa del nombramiento de fiscales interinos por la Comisión Permanente, Redondo reveló que el Partido Nacional buscaba elegir al director de fiscales para encubrir casos de corrupción. Anticipó posibles respuestas de los implicados, mencionando que podrían alegar persecución política, problemas de salud o mentales para evadir la aplicación de la justicia.

La crisis legislativa persiste, marcada por tensiones y desacuerdos entre las fuerzas políticas en el Congreso Nacional.