Zelaya pide olvidar “cantaleta” de persecución política y advierte sobre más requerimientos

Tegucigalpa. El Fiscal General de la República, Johel Zelaya, se pronunció este día sobre la reciente captura del General Romeo Velásquez y otros dos exmilitares de las Fuerzas Armadas, afirmando de manera tajante que el caso no tiene ninguna relación con la política.

«Por favor olvidemos esa cantaleta de que es político, no hay nada político», expresó el fiscal, negando categóricamente que las detenciones estén motivadas por intereses políticos, aseguró que el Ministerio Público es institución autónoma.

Zelaya también recordó algunas palabras de su padre, quien en su momento le habría dicho que «a los políticos no hay que ponerles cuidado, porque en cualquier momento los meten en problemas».

En relación al caso específico del general Velásquez, Zelaya aseguró que no tiene nada en contra del exmilitar, quien fue su superior en la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Hondutel) y  que no existe ninguna valoración personal hacia él ni hacia su familia», manifestó.

Consultado sobre la posibilidad de presentar más requerimientos fiscales, Zelaya no dudó en advertir que «vamos a emprender acusaciones contra muchas personas«.

Sin embargo, se limitó a no revelar los nombres de las personas que podrían estar involucradas. «El pueblo hondureño lo sabrá en su momento», aseguró, dejando entrever que en los próximos días podrían surgir nuevos requerimientos por corrupción.

En cuanto al expediente de Isi Obed Murillo, que en su momento se denunció sobre la desaparición, el funcionario explicó que este ha sido reconstruido y que todo está listo para el próximo viernes. «No hay manera de que el Ministerio Público se eche para atrás», subrayó Zelaya.

Finalmente, al ser consultado sobre las posibles personas a quienes se les podrían presentar requerimientos fiscales, el Fiscal General declinó dar nombres, asegurando que, cuando sea el momento, el pueblo hondureño conocerá los detalles de los nuevos avances en la investigaciónes.

Estas declaraciones fueron brindadas durante la ceremonia de traspaso de mando de la Policía Militar en el Campo de Parada Marte, ubicado en la capital hondureña.