Tegucigalpa. El Instituto Nacional Penitenciario (INP) de Honduras ha iniciado un ambicioso proyecto tecnológico que promete transformar la identificación y monitoreo de los privados de libertad en los centros penales del país. El general Ramiro Fernando Muñoz, comisionado presidente del INP, explicó los avances de esta nueva disposición en una entrevista reciente.
Tecnología biométrica: Un antes y un después en el sistema penitenciario
Según Muñoz, el sistema penitenciario ha enfrentado históricamente grandes retos en materia de identificación de los internos. Hasta el momento, la falta de herramientas tecnológicas había dificultado obtener información precisa sobre la identidad y condición jurídica de muchos reclusos. «Lo que ha pasado es que durante mucho tiempo el sistema no contaba con tecnología adecuada para identificar a los privados de libertad. Incluso, en ocasiones, un cabecilla de una organización criminal podía permanecer en el anonimato sin ser cuestionado», señaló el general.
Una base de datos precisa y accesible
El proyecto cuenta con dos fases fundamentales. La primera consistió en la identificación de los internos mediante el Registro Nacional de las Personas (RNP), lo que permitió cotejar y registrar correctamente a cada privado de libertad. La segunda fase, que estará lista en aproximadamente 40 días, consiste en la implementación de un moderno sistema biométrico. «Con solo colocar la huella digital del privado de libertad, se podrá acceder a toda su información jurídica, su estado procesal y otros datos relevantes», explicó el general Muñoz.
Además, este sistema permitirá tener un control más eficiente de las visitas, ya que se dejarán de realizar registros manuales. Los visitantes únicamente deberán colocar su huella para comprobar su identidad y verificar si están autorizados para ingresar.
Monitoreo constante desde un centro especializado
El general también destacó la importancia de un centro de monitoreo para garantizar el seguimiento constante de los privados de libertad, incluyendo aquellos que gozan de medidas como la pre-liberación. El sistema registrará automáticamente cualquier incumplimiento, como la falta de asistencia a firmar, y emitirá la alerta correspondiente al Ministerio Público para proceder con una nueva orden de captura. «Esto garantiza el control absoluto sobre el cumplimiento de las medidas de los reclusos que gozan de libertad parcial», enfatizó Muñoz.
Modernización integral del sistema penitenciario
Además de la implementación de tecnología de punta, el proyecto incluye mejoras en la infraestructura y transporte penitenciario, así como programas de reinserción social. Según el general Muñoz, esta modernización busca optimizar el funcionamiento del sistema penitenciario hondureño para brindar mayor seguridad a la población y garantizar el respeto de los derechos humanos.
La cuenta regresiva
El nuevo sistema tecnológico ya está en marcha y se espera que sea plenamente operativo en un mes aproximadamente. Las expectativas son altas, ya que representa un salto cualitativo en el manejo y administración de los centros penitenciarios del país.
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El general Muñoz dice que ahora con solo poner la huella ya sabrán si el privado de libertad es un alma en pena o un cabecilla con agenda. ¡Eso sí es eficiencia penitenciaria! #TecnologíaATodoMotor #CarcelSmart
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