VIDEO: ¡El héroe flotante de La Ceiba! Kelvin convirtió su cama inflable en balsa de rescate

LA CEIBA, ATLÁNTIDA. Lo que comenzó como una idea impulsada por la necesidad, ha terminado siendo un servicio vital para muchas personas atrapadas en sus casas debido a las intensas lluvias,  desde que la tormenta tropical Sara azotó la ciudad, y es que la creatividad y el altruismo de Kelvin Gonzales han marcado la diferencia en las zonas más afectadas por las inundaciones en el barrio El Tornonjal 2.

 

Kelvin, un joven ceibeño, decidió utilizar lo que muchos considerarían un objeto de ocio como su herramienta de ayuda: una cama inflable. En lugar de descansar sobre ella, la convierte en una balsa flotante, navegando por las inundadas calles de la residencial El Toronjal 2, especialmente en la avenida Los Próceres.

 

Con su cama inflable, Kelvin se pasea por las aguas que cubren la ciudad, cubriendo una distancia de unas dos cuadras, en ocasiones acostado y otras veces sentado, como si estuviera en una piscina.

«Es una idea que se me ocurrió, y gracias a Dios he podido ayudar a varias personas de la tercera edad que han querido salir y que la situación no les permite», expresó Kelvin con emoción, en una entrevista con Diario del Aguán. A pesar de la gravedad de la situación, su ingenio ha sido una herramienta de alivio para aquellos que no pueden salir de sus hogares, especialmente en áreas donde los cuerpos de socorro aún no han podido llegar a tiempo.

El joven también comentó, entre risas, que su improvisada balsa no solo ha sido útil, sino que también le ha dado un momento para disfrutar de un «baño» inesperado entre las aguas de la inundación. Desde el jueves, cuando la tormenta tropical Sara causó estragos en la ciudad, Kelvin utilizó su colchón inflable para transportar a personas de un lugar a otro, especialmente a aquellos que no podían salir por sí mismos.

«Evacuamos nuestra casa porque se inundó, tuvimos que sacar lo más necesario y a mi mamá, que sufre problemas respiratorios. Y así, de repente, se nos ocurrió esta idea», recordó Kelvin, quien a menudo transporta a dos personas a la vez con su colchón inflable.

Por ahora, Kelvin se ha convertido en un héroe local, un «guardián» que sigue atento a las necesidades de sus vecinos, dispuesto a poner su «locura» al servicio de la comunidad en estos tiempos de emergencia.