VIDEO: ASJ le canta la verdad al gobierno: la estrategia contra la deforestación va a paso de tortuga

VIDEO: ASJ le canta la verdad al gobierno: la estrategia contra la deforestación va a paso de tortuga

La organización advierte que, sin cambios de fondo, la lucha contra la deforestación será solo discurso; mientras tanto, los bosques del país siguen cayendo sin castigo a los responsables.

Tegucigalpa. A casi un año del lanzamiento oficial de la Estrategia Cero Deforestación al 2029, el panorama no es alentador. Solo cinco de las 18 acciones previstas han sido cumplidas, según reveló un informe presentado este jueves por la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) en el marco del Día de la Tierra.

El estudio, elaborado como parte del Programa de Gobernanza Climática financiado por Transparencia Internacional y Waverley Street Foundation, pone en evidencia que el plan ambiental del gobierno no avanza al ritmo ni con la seriedad que la situación del país demanda.

“Sin reformas estructurales, estas metas no serán alcanzables, y los bosques seguirán en riesgo mientras la impunidad sigue siendo la norma”, advirtió la organización.

Entre las acciones pendientes o sin avance se encuentran la anulación de títulos de propiedad ilegales en áreas forestales, la regulación de permisos municipales irregulares para dragado de ríos y tala de bosques, y el fortalecimiento de los batallones de protección ambiental, cuyo incremento de efectivos a 8,000 sigue sin concretarse.

A pesar de la promesa gubernamental de destinar L 19 mil millones para proteger regiones clave como Olancho, La Mosquitia y la Reserva de la Biósfera del Río Plátano, los resultados no se están viendo en el terreno. A ello se suma la falta de claridad sobre los L 2,000 millones supuestamente asignados en 2025, y la omisión de los L 1,000 millones prometidos para el año anterior.

Además, el informe critica que varias acciones fueron clasificadas como “no cumplidas” simplemente porque las instituciones responsables no entregaron medios de verificación, lo cual impide medir con precisión los avances.

“No basta con nombrar jueces. Si no hay recursos para que trabajen, los delitos seguirán impunes”, señala el documento.

La situación es preocupante si se toma en cuenta que en la última década los incendios forestales aumentaron un 114.64 %, y ya se han perdido más de 512 mil hectáreas de bosque de pino solo por plagas.

La impunidad es otro punto clave: según datos de la ASJ, el 94 % de los delitos ambientales en 2024 quedaron sin castigo. Un ejemplo claro de esta realidad es el asesinato del líder ambiental Juan López, ocurrido en septiembre del año pasado, cuyo caso continúa sin avances ni justicia para los responsables.

Ante esta crisis ambiental e institucional, ASJ hace un llamado urgente al gobierno para que:

Rediseñe la estrategia con base en acciones reales y medibles.

Asigne recursos financieros y humanos suficientes.

Establezca coordinación interinstitucional eficaz.

Garantice la transparencia en la ejecución del plan.

Involucre activamente a las comunidades locales en la gestión forestal.

“No se puede hablar de defender la naturaleza si no se enfrenta con seriedad la corrupción y el abandono institucional que permiten la destrucción de nuestros bosques”, concluye el informe.