El exjefe del Estado Mayor Conjunto de Honduras, el general en condición de retiro Romero Vásquez Velásquez, ha afirmado que los colectivos del Partido Libertad y Refundación (Libre) no actúan de manera independiente, sino que reciben financiamiento de terceros.

Según Vásquez Velásquez, los llamados «comandos insurreccionales» no surgen espontáneamente, sino que son estratégicamente impulsados por comunistas radicales. Advierte que el gobierno dividido y polarizado está creando una situación potencialmente explosiva para el país.

«Estos comandos reciben logística: combustibles, vehículos, motocicletas de sus líderes (del hombre del sombrero su comandante general y también el Grillo quien los adiestra, asimismo, un médico en chaqueta líder también de los comandos», aseguró en declaraciones a Radio América.

El presidente del Partido Alianza Patriótica también critica a Libre, acusándolos de generar divisiones y sembrar odio en la población hondureña. Sostiene que estos grupos son financiados y manipulados por actores externos, lo que los lleva a cometer actos delictivos y a promover el terrorismo de estado.

Vásquez Velásquez afirma que Libre busca ser golpeado para victimizarse, pero en realidad promueven el odio, la división y el caos en Honduras. Además, asegura que hay extranjeros asesorando a estos grupos y que sus planes son elaborados por el Foro de Sao Paulo y la izquierda internacional, con el objetivo de establecer una dictadura similar a la de Venezuela y Cuba, y posteriormente convocar a una Asamblea Nacional Constituyente.

El exjefe del Ejército hondureño también denuncia que los niños están siendo adoctrinados por extranjeros en barrios y colonias, con asesoría cubana y venezolana, para introducir un sistema fracasado que llevará al país a la pobreza.

Vásquez Velásquez hace un llamado a los hondureños a no temer a los comandos insurreccionales y a unirse para construir un país libre. Insta a la Policía Nacional a mantener el orden en el país de acuerdo con la Constitución y solicita a las organizaciones de derechos humanos que defiendan a todos los hondureños, no solo a los miembros de los comandos insurreccionales.

Finalmente, el exjefe militar insta al gobierno a resolver los problemas urgentes de Honduras, como el alto costo de vida, el desempleo y la reducción de impuestos a los combustibles, entre otros. También destaca que las Fuerzas Armadas deben intervenir cuando la paz en el país se ve amenazada.