Es el reconocido abogado penalista Marlon Duarte, quien expresa sus dudas acerca que la anunciada intención del Congreso Nacional de elaborar un nuevo Código Penal pueda concretarse, como ejemplo citó lo que sucedió con el actual, que llevó 10 años su elaboración, mientras que proceder con reformar solo tardaría cinco años, estimó.

«Lo que deberíamos hacer es un análisis artículo por artículo y realizar las reformas correspondientes, ya sea por adición o en función de la interpretación de cada artículo», afirmó el reconocido profesional del derecho.

Según Duarte, es fundamental realizar un análisis exhaustivo y objetivo antes de embarcarse en este proceso, que podría implicar un gasto significativo para el país.

En cuanto a costos, el jurista recordó que, el Código Penal anterior costó aproximadamente 500 millones de lempiras y advirtió que la creación de un nuevo código podría duplicar esa cifra, alcanzando los 1,000 millones de lempiras.

A la vez, desestimó la aparente necesidad de endurecer penas mediante un nuevo código, cuando lo mismo podría lograrse con reformas simples.

También advirtió sobre el posible uso político de las acusaciones contra funcionarios de períodos anteriores, recordando que cualquier nueva ley solo tendría efecto retroactivo si beneficia al imputado.

«No se puede imponer el nuevo Código Penal o sus reformas a funcionarios anteriores si estas son más graves que las leyes vigentes en el momento en que ocurrieron los hechos», concluyó Duarte.