Vilma Magdalena Julian Jackson fue detenida por presuntamente someter a un menor de edad a trabajo forzado y abuso físico y psicológico.
La Ceiba, Atlántida. La Fiscalía Regional del Litoral Atlántico y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC) informaron sobre la captura de Vilma Magdalena Julian Jackson, quien es acusada de ser responsable de trata de personas agravada en la modalidad de explotación en condiciones de esclavitud o servidumbre en perjuicio de un menor originario de Gracias a Dios.
La investigación comenzó a raíz de una denuncia presentada por la extinta Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (DINAF). La entidad alertó sobre una situación de abuso hacia un menor que, tras haberse escapado de la vivienda de la acusada, había sido sometido a condiciones de explotación física y psicológica. A raíz de esta denuncia, las autoridades comenzaron las diligencias pertinentes.
Según los datos recopilados por los agentes de investigación de la ATIC, el menor había sido trasladado desde La Mosquitia hacia La Ceiba junto a su madre, quien lamentablemente falleció poco después. Tras quedar huérfano, la sospechosa le ofreció un lugar en su hogar, pero lo que parecía ser un acto de apoyo se convirtió rápidamente en una pesadilla para el menor.
El niño fue obligado a realizar tareas domésticas, como limpiar la casa y lavar la ropa de Vilma Magdalena y sus hijos, sin permiso para salir a estudiar o tener contacto con otros niños. La situación empeoró cuando el menor fue sometido a castigos crueles, como ser hincado durante varios minutos sobre rayadores de queso. Los abusos no terminaron ahí; en un acto de violencia, Vilma Magdalena le infligió una herida en el brazo con un cuchillo, que no recibió atención médica, obligando al menor a amarrarse una camisa para detener la hemorragia.
Tras las investigaciones, la Fiscalía presentó los cargos correspondientes y el 26 de marzo, en audiencia de declaración de imputado, se dictó la medida de detención judicial en contra de Vilma Magdalena Julian Jackson, quien fue trasladada al centro penal de El Porvenir. La audiencia inicial se ha agendado para el próximo jueves 27 de marzo, donde se presentarán más detalles sobre el caso.
Este caso resalta la importancia de la vigilancia y la protección de los derechos de los menores de edad, quienes deben vivir en entornos seguros y libres de explotación. Las autoridades continúan con el proceso judicial para asegurar que se haga justicia en este lamentable suceso.