Decenas de efectivos que pertenecían a la Policía Nacional y fueron separados de esta institución, bloquearon con llantas en llamas, en las últimas horas la carretera CA-5 para exigir su reintegro laboral y otros derechos percibidos.
Los manifestantes que se encuentran específicamente a unos metros del peaje, de Zambrano y aseguran que estarán de forma indefinida. Es decir que no hay paso de Tegucigalpa hacia San Pedro Sula y viceversa.
Éstos solicitan un diálogo con las antiguas autoridades.
Además, los protestantes reclaman el pago de salarios no devengados desde el año 2016 que fueron separados hasta la fecha.
“Tenemos siete años de exigir nuestro reintegro y el gobierno no nos da respuesta", decía de ellos en San Pedro Sula, misma perición que hacen en la CA-5.
Dijo que la medida de presión es porque la presidenta les dio la pauta de que en las calles se ganan las luchas.
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