Tegucigalpa.- En una declaración polémica, el diputado del Partido Libre en Honduras, Nelson Leiva, arremetió contra la situación en el Congreso Nacional, criticando enérgicamente los acontecimientos recientes. Leiva lamentó la agresión al pueblo por parte de la Policía Nacional y acusó a esta institución de estar al servicio del Partido Nacional y de la dictadura, alegando que buscan desestabilizar el país y evitar el diálogo y el consenso.

El político también expresó su opinión sobre las negociaciones para nombrar un fiscal general, afirmando que el Partido Nacional tiene miedo de ser perseguido por delitos cometidos durante su mandato. Leiva argumentó que el Partido Nacional ha intentado pactar la impunidad y buscar acuerdos basados en esta premisa, mientras que su bancada, Libertad y Reformación, se mantiene firme en su rechazo a la impunidad y aboga por la justicia en el país.

El diputado negó rotundamente las acusaciones de que su partido estuviera buscando un fiscal a medida y enfatizó que su principal objetivo es asegurar que se persiga el delito y se castigue a los culpables, lo cual, según él, no debería considerarse persecución política.

Leiva destacó una reunión de su bancada el día anterior y se quejó de las amenazas recibidas por parte de otros diputados, argumentando que su partido prefiere resolver asuntos internamente en lugar de dañar la imagen del gobierno en los medios de comunicación, arremetiendo contra Francis Cabrera, de la misma bancada, y quien más temprano denunció supuestas amenazas de un grupo denominado «Territorio Libre 2.0», aseverando que en WhatsApp, el diputado Leiva amenazó de quitar diputados propietarios por suplentes, para que no voten como ellos quieran.

Sin embargo, lo más llamativo de sus declaraciones fue su amenaza de reemplazar diputados propietarios por diputados suplentes si consideran que es necesario. Esto generó preocupación en el panorama político hondureño, ya que Leiva dejó en claro que no permitirán otra traición al pueblo hondureño y están dispuestos a tomar medidas drásticas para asegurarse de que sus intereses se cumplan.

«El Partido Liberal en la elección del fiscal pasado, quito a sus propietarios, un mal presedente. Pero si es necesario lo vamos a hacer, Porque no vamos a permitir traiciones al pueblo hondureño. Y que eso lo tengan claro», dijo.

Estas declaraciones resaltan la creciente división y tensión en la política de Honduras, con un  Partido Libre amenazando con acciones radicales a miembros de su propia bancada para mantener su influencia y defender sus puntos de vista en el Congreso Nacional.