Muerte de adolescente en operativo policial causa indignación y COIPRODEN exige justicia inmediata

Diseno sin titulo 22

San Marcos, Ocotepeque . La muerte del adolescente Ángel Ariel López Mejía, de 16 años, en un hecho confuso que involucra a agentes policiales destacados en un retén en San Marcos, ha provocado una ola de indignación y preocupación a nivel nacional. La organización COIPRODEN, que aglutina a instituciones defensoras de los derechos de la niñez y juventud, emitió un enérgico pronunciamiento exigiendo justicia, verdad y acciones concretas del Estado.

Según el relato de los familiares, el joven perdió la vida presuntamente a manos de policías en circunstancias que aún no han sido esclarecidas. Ante esta situación, COIPRODEN se solidarizó con la familia de la víctima y exigió una investigación profunda, independiente y sin dilaciones por parte del Ministerio Público, especialmente a través de la Fiscalía de la Niñez.

“La muerte de Ángel Ariel no puede quedar impune. Se deben deducir responsabilidades y suspender de inmediato a los policías implicados mientras se desarrollan las investigaciones”, demandó la red de organizaciones.

La Red COIPRODEN también hizo un llamado directo al Ministro de Seguridad para que tome acciones inmediatas en este caso y recordó que solo en el primer trimestre de 2025, su monitoreo en medios reporta un promedio de 50 muertes violentas al mes de personas entre 0 y 30 años en el país, reflejando un patrón alarmante de violencia contra la niñez y juventud.

Además, urgieron al Gobierno de Honduras a cumplir su “responsabilidad ineludible de proteger la vida e integridad de todas las personas, con especial énfasis en niñas, niños, adolescentes y jóvenes”, e insistieron en la implementación efectiva de la Política Nacional de Prevención de Violencia contra la Niñez y Juventud, acompañada de una asignación presupuestaria real.

COIPRODEN reiteró su compromiso de seguir apoyando iniciativas que garanticen la protección integral y una vida digna para la niñez y adolescencia en Honduras, al tiempo que solicitó atención y acompañamiento tanto de la comunidad nacional como internacional para visibilizar este caso.