TEGUCIGALPA.- Después de negociar el pago del denominado "impuesto de guerra", los conductores de buses tipo rapiditos que cubre la  ruta Kennedy-Río Grande-Cerro Grande, en la capital reanudaron sus operaciones.

Cabe recordar que esas unidades de transporte desde hace varios días estaban paralizadas debido al cobro de extorsión.

De acuerdo a la información que se conoció, la banda criminal conocida como “Los Chirizos” aumentó la cuota del impuesto de guerra.

Los transportistas ahora deberán pagar supuestamente 1,400 lempiras más luego de  esa negociación, pues la cantidad que acordaron no ha sido confirmada o descartada por los transportistas. La cantidad se maneja porque era la que exigía desde el inicio el grupo criminal.

Lo que sí confirmó un medio capitalino, es que los transportistas tuvieron que negociar con los extorsionadores para reanudar el transporte en esa zona.