Redaccion. Con fuertes señalamientos de que la Ley de Violencia contra la Mujer busca encubrir la legalización del aborto y la introducción de “ideologías colonizadoras”, el abogado Jano León Rivera, representante del movimiento “Por Nuestros Hijos”, se pronunció en el programa En la Mira para advertir sobre disposiciones que —asegura— atentan contra la vida y la familia.

El profesional calificó de “engañosas” estas propuestas legislativas, asegurando que “nos presentan leyes con títulos bonitos, pero contienen cláusulas que promueven el aborto bajo cuatro causales y que obligarían a los profesionales de la salud a practicarlo, independientemente de sus principios”. Según él, el proyecto de ley ampara la interrupción del embarazo en casos que incluyen malformaciones congénitas y peligro para la vida de la madre, e incluso contempla sanciones para aquellos médicos que se nieguen a realizar el procedimiento.

“Madrugones” legislativos y anteriores intentos

El abogado recordó que anteriormente se detuvo una norma sobre prevención de embarazos en adolescentes que, a su juicio, contenía “disposiciones nefastas”. Fue rechazada luego de la presión ciudadana y de que, según sus palabras, se evidenciara que “estaba contra los principios hondureños, de la ciencia y de la familia”.

Rivera teme que “se vuelva a recurrir a los madrugones”, es decir, la introducción de reformas a última hora en el Congreso Nacional. También señala que se están impulsando modificaciones a la Ley contra la Violencia Doméstica con conceptos como “perspectiva de género” e “interseccionalidad”. “No son más que herramientas para dividir a la sociedad y obligarla a adoptar modelos ajenos a nuestra cultura”, afirmó.

Cuestionan la “ideología de género”

Otra preocupación expresada por el abogado es la “imposición de la ideología de género”, sustentada en la idea de que “el sexo no determina al individuo al nacer”. Rivera advierte que el proyecto legal podría “sancionar a padres que orienten a sus hijos según el sexo con el que nacieron, por considerar que ello atenta contra la libre determinación del menor”. Desde su punto de vista, “una niña de 5 o 6 años podría reclamar el derecho de identificarse como varón y la sociedad tendría la obligación de respetarlo, sin importar la opinión de los progenitores”.

Falta de diálogo con las autoridades

Pese a que su organización afirma haber buscado reuniones con el ministro de Educación, Daniel Sponda, y otras autoridades, “no hemos logrado la respuesta esperada para presentar guías de educación sexual basadas en valores familiares y en la postergación de las relaciones sexuales hasta el matrimonio”, sostuvo. Aun así, valoró la reciente retirada de una guía impulsada por la Secretaría de Educación como una “victoria ciudadana” que frenó contenidos supuestamente dañinos para los menores.

El reto del Congreso Nacional

Rivera enfatizó que para aprobar cambios tan profundos, algunos artículos de la Constitución tendrían que modificarse con mayoría calificada, algo que considera “difícil, pero no imposible si ocurre un pacto en la recta final”. Recalcó que la ciudadanía debe “mantenerse vigilante de cualquier intento de legalizar el aborto y forzar la ideología de género a través de la Ley de Violencia contra la Mujer o reformas paralelas”.

“No podemos permitir que, con la excusa de proteger a la mujer, se legalice el aborto y se imponga a las familias hondureñas una visión ajena a nuestros valores”, concluyó, llamando a los diputados a “leer íntegramente los proyectos de ley y no aprobarlos a ciegas”.