En solo cuatro meses, más de mil 16 mil hectáreas de bosque han sido devastadas.
Tegucigalpa. El fuego sigue ganando terreno en los bosques de Honduras. Según un informe reciente del Instituto de Conservación Forestal (ICF), en lo que va del 2025 se han registrado 468 incendios forestales en el territorio nacional, lo que ha provocado la pérdida de más de 16 mil 227 hectáreas de bosque.
Francisco Morazán es el departamento más afectado, con 182 incendios reportados y al menos 4 mil 781 hectáreas dañadas.
Las cifras alarman, pero no sorprenden. Solo en marzo se contabilizaron 232 incendios y en abril ya se reportan 197 más, reflejando una preocupante aceleración en los registros mensuales.
Si bien las autoridades prevén una disminución en la cantidad total de incendios respecto a años anteriores, cuando se superaron los 3 mil siniestros anuales, el ritmo actual despierta dudas sobre el cumplimiento de esa meta.
La quema agrícola, el cambio climático y la acción humana deliberada están detrás de más del 90 % de estos incendios.
La prolongación de la temporada seca y las altas temperaturas agravan el problema, dejando a los ecosistemas vulnerables y sin defensa ante el fuego.
El impacto ambiental es devastador
Honduras pierde entre 50 mil y 80 mil hectáreas de bosque al año por incendios y tala ilegal. Esto no solo significa árboles arrasados, sino también ríos secos, fauna desplazada, contaminación del aire y escasez de agua para las comunidades rurales.
Regiones como La Mosquitia, reconocidas por su biodiversidad, sufren especialmente estas consecuencias.