Fue difícil, pero clasificaron. El Barcelona se metió hoy en la final de la Copa del Rey al imponerse 3-0 al Sevilla, en la prórroga de la vuelta de semifinales del torneo, remontando así el 2-0 adverso que había sufrido en la ida.
Ousmane Dembélé abrió el marcador (12) y Gerard Piqué puso el 2-0 en el descuento para llevar el duelo a la prórroga (90+4).
En los minutos de desempate, llegó Martin Braithwaite para anotar de cabeza el 3-0 (95), que dio al Barça el pase a su séptima final de Copa desde 2014.
Ha sido sufrido y llega en buen momento para el cuadro azulgrana, sumido en una crisis institucional.