La final de Copa Oro era una prueba de fuego para el árbitro hondureño, Said Martínez y logró superarla de la mejor manera con mayoría de comentarios favorables.
El juego México-Estados Unidos terminó sin polémica y definido por Robinson al minuto 116, a través de un cabezazo.
Said que estuvo acompañado en la asistencia uno por el compatriota, Walter López fue enérgico, personalidad y conducción en mayor parte del juego.
Se le cuestiona no haber expulsado a Héctor Herrera de México, luego que levantará su pierna y golpeó la cabeza de un rival. Solo amonestó.
“Mal cierre, el hondureño Said Martínez terminó con muy bajo nivel el segundo tiempo, no expulsó a Herrera y no sancionó un penal a favor de México en el min. 88”, opinó el exárbitro Felipe Ramos Rizo.