Tegucigalpa. El expresidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP), Eduardo Facussé, alzó la voz este fin de semana para expresar su preocupación ante el rumbo que ha tomado la situación laboral en Honduras, tras las manifestaciones del Día del Trabajador, realizadas el pasado 1 de mayo.

En entrevista con el programa Auditorio HRN, Facussé cuestionó el tono y el enfoque de la movilización. “A mí me sorprende enormemente que en las manifestaciones que sucedieron el 1 de mayo, dirigentes obreros, mal llamados dirigentes, hicieron acopio del problema del desempleo que tenemos aquí en Honduras. Y eso que me cuenten una de vaqueros, si acaso ellos han creado algún empleo aquí en este país durante este gobierno”, declaró contundentemente.

A juicio del exdirigente empresarial, los actuales líderes sindicales han perdido el rumbo y se han “plegado completamente a una ideología fracasada” que, lejos de unir al país, está sembrando división. “Eso no es nada saludable. Esa manifestación era de los trabajadores, no de los políticos. Estamos desviando la atención del mayor problema que tiene nuestro país, que es el desempleo”, sentenció.

Facussé también comparó el accionar del sector privado frente al Gobierno, subrayando la postura del COHEP durante la jornada del Día del Trabajador. “El Consejo Hondureño de la Empresa Privada marcó pautas al poner dos banderas en su edificio hablando del empleo. Sin insultar, sin molestar, pero diciendo las verdades cotidianas que tenemos día con día”, indicó.

Durante su intervención, también hizo un análisis demográfico para ilustrar la gravedad del problema: “Aquí, año con año, con el crecimiento normal de la población, salen más o menos alrededor de 200 mil personas que nacen”. Según su argumento, si no se crean condiciones adecuadas para generar empleo, esos jóvenes no tendrán un futuro digno.

Señaló la responsabilidad del Gobierno y de ciertos sectores políticos. “Hay que estar bastante diciendo que las diez familias, del familión de las familias hondureñas que se roban el 80%, que no pagan impuestos. Y los familiones que tienen ellos metidos en el Gobierno quieren desviar la atención”, declaró.

Denunció que se ha promovido un “empoderamiento del poder” por parte de quienes están gobernando, sin generar resultados en empleo ni en desarrollo. “Esa pelea y ese odio que han generado a través del tiempo no nos beneficia a nadie, atrasan al país”, lamentó.

El empresario coincidió en que Honduras necesita un cambio urgente de rumbo y políticas que promuevan la inversión, la estabilidad y el trabajo digno. De lo contrario, advirtió, “vamos a tener muchos años por delante para tratar de resarcirnos de los problemas que estamos heredando no sólo de este gobierno sino también de gobiernos anteriores”.