En hechos violentos diferentes, dos conductores del transporte púbico fueron asesinados este día en el país, desgraciadamente uno de ellos falleció.
TEGUCIGALPA. El primer caso sucedió en la ciudad de La Ceiba, desde donde se reportó un ataque armado contra un conductor de la empresa de transporte Emtraicol, ocurrido a inmediaciones de la Sitramedys, en la comunidad de Satuyé, municipio de La Ceiba, Atlántida.
Reportes preliminares indican que la víctima resultó gravemente herida, por lo que fue trasladada de emergencia en una patrulla policial a un centro médico.
Mientras que el otro caso sucedió en Tegucigalpa, en donde el conductor de un taxi fue herido mortalmente por un criminal que se hizo pasar por pasajero.
Este conductor de taxi con registro 2736, fue identificado con el nombre de José Humberto Antúnez, conocido por sus compañeros de trabajo por el mote de «Moche», fue asesinado en una de las calles de la colonia La Reforma, de Tegucigalpa.
.De acuerdo con la versión preliminar de las autoridades, el conductor de taxi estaba lavando su carro, pero un pasajero le pidió el servicio, por lo que decidió realizar la carrera.
REACCIÓN DE LOS TRANSPORTISTAS
Estos dos nuevos hechos violentos hacen que los transportistas se pongan en alerta, como lo expresó el dirigente gremial, Gerardo Aguilar, lamentó que la criminalidad no tenga tregua en contra de los trabajadores del transporte público en Honduras.
“Realmente esto es una muestra más de lo que hemos sufrido año tras año, desgraciadamente cada vez que nos referimos a este tema no podemos dar algo diferente, no podemos decir buenas nuevas, no podemos decir que se acabó la extorsión, que ya están desarticuladas estas bandas criminales, al contrario, hoy ya estamos por iniciar un nuevo estado de excepción y no vemos los resultados, algunos en campaña abierta han anunciado que van a tomar medidas para eliminar la extorsión, un mal que por dos décadas nos ha quitado cientos de vidas, vidas irreparables; lo material podrían recuperarse, pero estas vidas lamentablemente quedan en impunidad”, reprochó.
“Ya que más de un 90% de los casos denunciados no han sido judicializados, y tampoco existe la reinserción social de aquellas personas que fueron vencidas en juicio. Por lo tanto, ellos van a estos centros penales, como se les ha llamado por años, como las universidades del crimen, salen fortalecidos a seguir incurriendo en lo mismo”.
“Y esta es la muestra de la situación que a diario lamentamos; cada vez que usted ve un atentado, un acto de terrorismo, un asesinato, es producto de un nuevo grupo de extorsionadores”.
“Entonces, esto es un reflejo de que a este hombre que perdió su vida trabajando honradamente para dejar sustento a su hogar, fue víctima de la extorsión de un nuevo grupo criminal”.
“Nosotros solicitamos a las autoridades que de una vez por todas tomen cartas en el asunto, porque esto no se le puede heredar a otro gobierno, es absurdo seguir pensando en lo mismo, culpando al anterior y lavándose las manos”.
“Este año, este gobierno prometió muchas cosas, desgraciadamente, no hemos visto los frutos de las promesas”, finalizó.