El vicepresidente del congreso Nacional y cuñado de la mandataria, Carlos Zelaya, respondió a interrogantes de los periodistas en su nativo departamento de Olancho.

Preguntas que obviamente tenían que estar relacionadas a la tensa situación diplomática que se ha desatado producto de las expresiones de la embajadora estadounidense, Laura Dogu, quien deploró la reunión de funcionarios hondureños con funcionarios de Venezuela a los que se refirió como narcotraficantes.

“Solo puedo decir que, desde el principio del gobierno, la embajadora Dogu ha estado en permanente injerencia en los asuntos de nuestro país, creo que lo último que ha dicho la embajadora, donde prácticamente acusó a las Fuerzas Armadas y al ministro de Defensa de estar coludidos con el narcotráfico, yo creo que fue lo que rebasó el vaso y la presidenta tomó una acción en esa decisión”, dijo.

Al responder a la interrogante que si la embajadora tiene facultades para hacer este tipo de cuestionamientos el vicepresidente del Congreso Nacional respondió. “No para nada, el Tratado de Viena y los tratados convencionales dicen que debemos ser respetuosos del derecho ajeno y también la no injerencia es uno de los principios fundamentales para la buena relación entre los países”, consideró el diputado Zelaya.

Con respecto a los señalamientos de la oposición que él sería uno de los que figuran en las listas de los solicitados en extradición, Zelaya recordó que ¡trece años tienen de estar diciendo; y efectivamente, a nosotros se nos mencionó en el juicio de Juan Orlando, pero ojo, no nos mencionó la Fiscalía, nos mencionó la defensa, hasta pasaron un papelito por ahí, pero nosotros no tenemos ningún problema”, aseguró.