Tegucigalpa. A menos de un año de que finalice la administración de Xiomara Castro, fuertes cuestionamientos recaen sobre la gestión del sistema de salud pública. Blanca Munguía, directora de Salud de la Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ), denunció que, a pesar de haberse mantenido durante todo el gobierno bajo un decreto de emergencia sanitaria, nunca se logró abastecer por completo los medicamentos en los centros hospitalarios del país.

“El decreto de emergencia debía ser una herramienta excepcional, pero se volvió la regla durante cuatro años, sin que se lograra garantizar ni el 100 % de medicamentos ni transparencia en las compras”, advirtió Munguía, señalando que el mecanismo permitió adquisiciones sin licitación, pero no generó los resultados esperados.

Los últimos hallazgos de la ASJ revelan que un 24 % de los pacientes aún no recibe sus medicamentos completos. Esta cifra, aunque ligeramente inferior a la de meses anteriores, refleja la persistente debilidad estructural. El panorama es aún más crítico en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), donde el 40 % de los usuarios aseguraron no recibir tratamiento completo.

La situación se agrava al considerar que un 31 % de los pacientes sufre enfermedades crónicas, mientras que el 48 % vive sin ingresos fijos y otro 20 % gana menos de 6 mil lempiras al mes, lo que complica aún más su acceso a tratamientos por cuenta propia.

Del lado del personal médico y de enfermería, solo un 21 % afirma tener los insumos necesarios para trabajar. Un contundente 76 % reporta carencias y un 3 % asegura no contar con ningún tipo de recursos.

Frente a este contexto, los pacientes encuestados demandan acciones urgentes: dotación completa de medicamentos, mejor infraestructura hospitalaria y reducción de tiempos de espera para atención especializada. Mientras tanto, el gobierno continúa operando bajo el mismo decreto de emergencia que, hasta ahora, parece haber generado más preguntas que soluciones.