Tegucigalpa. La funcionaria del Consejo Nacional Electoral (CNE), Ana Paola Hall, denunció ante el Ministerio Público haber recibido amenazas relacionadas con su labor dentro del organismo electoral. Advirtió que estas intimidaciones buscan afectar su trabajo en la organización de los próximos comicios y representan una grave amenaza contra la integridad del proceso democrático en Honduras.
«En las últimas horas, he sido objeto de amenazas e intimidaciones directas, motivo por el cual interpuse una denuncia ante el Ministerio Público. Esta situación está claramente vinculada a mis responsabilidades como consejera del CNE, en especial a mi papel en la organización de las elecciones primarias y mi futura presidencia en las elecciones generales del 30 de noviembre», manifestó Hall en un comunicado.
La funcionaria señaló que lo ocurrido ha sobrepasado los límites de su vida pública, afectando su seguridad personal y la de su familia. «Es un ataque que va más allá de mi rol como autoridad electoral, tocando lo más sagrado para cualquier mujer y madre hondureña», enfatizó.
A pesar de las amenazas, Hall aseguró que el calendario electoral se mantiene y envió un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos, la comunidad internacional y los partidos políticos. «Las elecciones primarias se llevarán a cabo el 9 de marzo, con todos los mecanismos de transparencia requeridos para garantizar que se respete la voluntad popular. No permitiré que estas amenazas debiliten el compromiso con la democracia, seguiré trabajando sin descanso para un proceso electoral justo y legítimo», aseguró.
El caso ha generado alarma en sectores políticos y sociales, quienes exigen que las autoridades tomen medidas inmediatas para garantizar la seguridad de la funcionaria y la transparencia de los comicios. Mientras tanto, el país sigue expectante ante este nuevo episodio de presión y posibles intentos de interferencia en el proceso electoral.